No voy a hablar de las peripecias de los conductores para llegar a sus destinos a tiempo porque evito en la medida de lo posible el uso del coche en la ciudad, en serio, saca lo peor de mí...
Así que me limito a mi experiencia diaria, y es que hoy según volvía he oído con indiscreción un retazo de conversación entre una madre y su avispado hijo, la madre le iba diciendo "¡Cómo estoy de las obras...!" a lo que su criatura rápidamente añadió sin dejarla terminar "¡hartiiiiiiiiisimo!".
Fiel reflejo del sentir general...
Vamos, que lo de renovarse o morir y por el bien de los ciudadanos lo entendemos todos. De igual manera que no somos tontos y comprendemos que alguien se forra a cuenta de las susodichas obras, porque tiene chicha el tema... no iréis a decirme ahora que no!!! ¿cuándo fue la última vez que abrieron en canal esa misma calle cuyas tripas ahora yacen al descubierto? ¿un año? ¿un poquito más o menos? Y es que en su momento no se dieron cuenta que lo dejaban a medias!!??
Lo de la falta de previsión a lo mejor es meramente anecdótico y es que no sé nada de leyes urbanísticas y demás parafernalia... pero sé que cuando en una calle estrecha metes más de tres mini-escavadoras la colapsas, y más aún si no cortas el tráfico y el cruzar la calle se convierte en un jugarse la vía, a ver que no vengan coches, ni el tranvía, ni la puti-escavadora marcha atràs! y cuando llegas al final de la calle, anda!!! hay que dar media vuelta porque hay un mega camión bloqueando el paso con su vomitona de piedras y polvo...
Pues nada, ya me explayado...